Hoy, como cada 9 de Mayo celebramos el día de Europa. Este año de una manera tal vez menos festiva y, por supuesto, sin presencialidad. Pero esto no significa ni menos fraternal ni menos sentida.

Tal día como hoy, hace 70 años (9 de Mayo de 1950), Robert Schuman, entonces Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Francia presentaba su propuesta para unir Europa y contribuir así a evitar nuevos movimientos bélicos en el continente. La evolución de aquella inicial propuesta nos ha llevado a La Unión Europea que conocemos hoy, forjada a partir de pequeños, medianos e incluso grandes pasos; pero en cualquier caso hecha a partir del esfuerzo común; entes políticos, operadores económicos y sociales, sociedad en general y, por supuesto, las propias instituciones.

Este año celebramos un día de Europa diferente, no sólo por las circunstancias que nos llevan a una conmemoración más íntima, sino también por haber perdido un compañero de viaje, que ha dejado por el camino la ilusión en el proyecto y ha preferido caminar solo. Lejos de ninguna crítica, libertad de decisión y suerte en la nueva etapa, pero sin perder la oportunidad de expresar mi derecho a opinar que a pesar de todo, dentro estamos mejor.

Porque la creación de la Unión Europea, como cualquier proyecto ambicioso, es esto. Avanzar, tropezar, caer, levantarse, equivocarse, rectificar… Sobre todo cuando es un proyecto que no tiene precedentes y, por tanto no podemos reflejarnos en los logros de otros y aprender de ellos. El espejo somos nosotros, y eso nos debe hacer sentir todo el orgullo de lo que hacemos, pero también toda la responsabilidad del trabajo, de la imagen y del mensaje que enviamos.

Nos dicen que el mundo cambiará raíz del Covidien-19. No sé hacia dónde irá ni qué retos diferentes tendremos que asumir. Pero sin duda todo reto es una oportunidad, y como cada día, porque la Unión Europea la hacemos cada día entre todas las personas, deberá trabajar para ser mejor y, sobre todo, para hacer mejor el mundo en que vivimos, velando por todos y contando con todos, incluso a pesar de los zarandeos que recibe y recibirá desde dentro y desde fuera.

Persistencia, esfuerzo y responsabilidad.

Feliz día de Europa 2020

José Ma. de Dios

Instituto de Estudios Europeos

Universitat Autònoma de Barcelona UAB